jueves, 31 de marzo de 2011

140 Caracteres: Twitter como Género

El pasado martes 29 de marzo de 2011, las escritoras Erika Mergruen (@mergruen), Paola Tinoco (@paolatinoco), Cecilia Juárez (@magami), Graciela Romero (@Diamandina) y yo (Sarai Robledo, @LaInsomne), formamos parte de la segunda plática del ciclo “140 caracteres” en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia para hablar sobre el impacto que ha tenido twitter en los géneros literarios (o viceversa).




Durante la charla se tocaron puntos importantes sobre cómo se utiliza twitter dentro de la literatura, si es twitter un género o una herramienta, cómo se transforma la expresión literaria dentro de twitter, si se puede o no dar espacio para el arte y cómo se permea la cuestión sexogenérica en un medio como éste.


En mi caso, cuando me invitaron a participar y me dijeron que la idea era abordar los géneros literarios en twitter y también el tema de la mujer tuitera; pensé en muchas cosas. Primero, en que twitter no es un género literario sino una herramienta (conclusión que compartimos todas las integrantes de la mesa); segundo, que sí hay muchas formas en que la identidad hombre-mujer se permean en la forma de tuitear pero no son determinantes (ahorita mismo yo podría tuitear como alguien que no soy) y tercero, que la “literatura de género”, desde mi punto de visa, no existe: hay o no hay literatura, punto.


Tras estas primeras ideas, escribí un texto que me permití leer en la charla y en el que trato de cerrar un poco lo que yo pienso de twitter como espacio y cómo creo que se permea la identidad de las mujeres que tuitean.

Espero sus comentarios.

TWITTER COMO GÉNERO


Por: Sarai Robledo

“Yo, la peor de todas”, tuitearía Sor Juana.

Twitter es como los graffitis que aparecen en las paredes de los bancos, en las oficinas de los burócratas o en las puertas de una casa o un negocio. Un día despiertas y el graffiti ahí está; al día siguiente ya no.


El graffiti pudo haberte inundado con su mensaje o no. Un tuit también.


¿Es twitter efímero, o sólo no alcanzamos a vislumbrar, pero tampoco a perder, la musicalidad de los tuits que no se desgastan con el tiempo? Twitter es un medio que pierde temporalidad para quienes nos sumergimos en él y lo leemos cientos de veces al día.

Los tuits, como los graffitis, siguen sudando sobre las paredes del TL y llaman a la expresión, al placer, al amor, a la desobediencia y a convertir la vida cotidiana en algo distinto.

Expresar se conjuga con sentir y crear.


Twitter es un abanico no jerarquizado ni ordenado, tampoco es temático. No hay género definido. Twitter es cotidiano.


Si partimos desde cómo se permea la cuestión sexogenérica en Twitter, por el momento, sólo podría expresarla desde la cotidianidad de las mujeres de mi TL. Es en esa vida cotidiana donde, mientras unas se quejan de que las piropearon al cruzar la calle, otras agradecen al hombre creativo que las hizo sentir bonitas. También otras pueden estar corrigiendo la tarea de los hijos mientras tuitean su preocupación por el pésimo sistema educativo del país; con una mano, saca otra la lista de compras mientras contesta alguna mención de aquella mujer que está aburrida en una junta inútil del trabajo. Al poco rato, otra mujer pide tuit-consejos para hacer el disfraz de manzana de su hija y otra pregunta por el mejor lugar para beber un café con los amigos. Una más, incita las bajas pasiones de los hombres que la siguen mientras que otras tantas ya están organi
zando fiestas virtuales en casa de alguien. Entre tuit y tuit, también leemos las que, inspiradas por un amor en ciernes o uno fallido, lanzan versos que nos hacen retuitear.

Y así vamos construyendo nuestro TL, esas grafiteadas desde nosotras y nuestra cotidianidad que es concreta, que es la cotidianidad que compartimos o no con nuestros seres queridos.


El útero, la presión de nuestros tacones al ser aventados, la puta que llevamos dentro, la sensualidad en el fondo de nuestras bolsas, la voz que se escucha a través del maquillaje, las que somos o queremos ser pueden ser los lugares desde donde nos expresamos.

Twitter se convierte entonces en un juego de intuiciones, de sensibilidades, donde la razón puede salir a dar la vuelta un rato porque la inmediatez del medio permite la víscera.


Twitter es un lugar donde puedes decir eso que muchas veces te guardabas; desordenar el orden, romper el equilibrio piramidal que tenemos en la sociedad; terminar con el silencio; desgarrar las buenas costumbres y dejarlas tiradas en la cocina, olvidarte de las fidelidades necias y las resignaciones absurdas.


Twitter es un espacio donde podemos dejar de lado nuestra persona institucionalizada y poner en él nuestro cuerpo vulnerable, sensible, sensual, creativo.


Si las paredes hablaran, pedirían graffitis todo el tiempo. Lo mismo ocurre con el TL.


Para quienes no pudieron acudir a la mesa o seguirlo en vivo a través de twitter o del livestream, aquí un fragmento de la charla:


sábado, 26 de marzo de 2011

140 Caracteres: La llegada de la Twitteratura

Lo que comenzó siendo un medio para expresar lo que estabas haciendo en no más de 140 caracteres, se ha convertido en un canal con funciones inimaginables y todavía indefinibles.

La literatura no ha sido indiferente a este medio y, es a través de twitter, que muchos escritores y no escritores experimentan diariamente con la concreción que este medio requiere. Twitter es un espacio idóneo para la proliferación de aforismos y minificciones; sin embargo, todavía es prematuro definir los alcances o limitantes de este medio en cuanto a literatura se refiere.


Es por esto que el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), a través de la Coordinación Nacional de Literatura (CNL), está realizando un ciclo de pláticas-debate titulado: "140 caracteres" en donde se busca explorar la escritura que se realiza en este medio, twitter: cuentos, poemas, minificciones, aforismos, palíndromos y otros géneros aún desconocidos o que están por inventarse.


La primera charla de este ciclo se realizó en el mes de febrero y contó con la participación de importantes escritores como Alberto Chimal, Ruy Feben, Renato Guillén, Isaí Moreno y Antulio Sánchez. Cada uno, desde sus diferentes actividades literarias y ‘tuiteras’, abrieron la discusión sobre el papel de twitter en la literatura.


La segunda mesa se realizará el próximo martes 29 de marzo de 2011 a las 19:00 hrs. en el Centro de Creación Literaria ‘Xavier Villaurrutia’ (Nuevo León 91 Col. Hipódromo Condesa) y lleva por título: “Twitter como género” en la cual tendré el honor de participar y estar al lado de Erika Mergruen, Paola Tinoco, Cecilia Juárez y Graciela Romero.


Si van, allá nos vemos y, si no pueden asistir, sigan la charla con el hashtag #140cc, en el twitter de @literaturainba o de cada unas de las que participamos en la mesa.


Sarai Robledo



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Quiero bañarme en tu culpa,

para pedirte después que me abandones.




martes, 22 de marzo de 2011

Feliz Cumpleaños Goran Bregović (Срећан рођендан)

El día de hoy, el músico y compositor Goran Bregović está cumpliendo 61 años. Su trabajo ha influenciado el desarrollo de la música balcánica.

La música de Goran no sólo es un reflejo de la cultura de la antigua Yugoslavia, sino que también tiene una carga de protesta ante las injustas condiciones que ha vivido dicha nación. Bregović realiza composiciones polifónicas en donde podemos escuchar los ritmos balcánicos aderezados con sonidos de rock o gipsy.



Goran también ha musicalizado innumerables películas como Arizona Dreams (protagonizada por Johnny Depp) y Underground, ambas del director y también músico erbio Emir Kusturica (quien se presentó el domingo pasado en la Ciudad de México y de quien hablaré más adelante.

Pareciera que fue ayer, pero hace 3 años ya de que Goran Bregovic, vestido con su característico traje blanco, estuviera en México presentando su "Celebración de Boda y Funeral". Dejo aquí, a manera de celebración por estos 61 años de vida, la nota y las fotografías que publiqué aquel 30 de abril de 2008.


Celebración de Boda y Funeral

Íbamos todos a la fiesta del funeral para celebrarnos en medio de las bodas entre las almas que se acercaban con esa ansia que consuela.

La cita: Plaza de Santo Domingo.


En ese momento, aquel lugar que siempre se ve inundado de comerciantes, imprentas y gente que va de un lado para otro, se convirtió en algo ajeno al mundo. Fue la mítica plaza de Santo Domingo, frente a su iglesia, la que se convirtió en testigo del orgiástico momento.

Un compás.

Dios Nunca Muere. Todos atentos. Poco a poco las notas iban una a una penetrando los poros de la piel. Los oídos de los presentes reconocían esos compases y dejaban salir con ellos el espíritu de la llorona mientras la Sandunga danzaba entre ellos.

Un Silencio.

El sonido de una trompeta que no emanaba del escenario saca del absorto en el que se encontraban todos los asistentes. El sonido de una tuba que salía de entre la concurrencia comenzaba a desatar la algarabía de todos, luego llegó otra, otra y otra nota desde diferentes puntos de la plaza. La música emanaba. Ahí estaban. Un acordeón hipnotizante y acompasadamente libre regresó las miradas al escenario y volcó los corazones. La música para boda y funeral había comenzado…

Aplausos, gritos vociferantes, ansia, ansia, ansia. Todos con el alma gitana guardada en la piel mexicana que pacientemente explotaba entre el ansia, ansia, ansia...la libertad...

Así, Goran Bregovic y los 45 músicos Bosnios y Oaxaqueños iniciaron lo que sería una velada llena de sorpresas, de reencuentros, de reconocimientos, de hablar un solo idioma, de brincar, de cantar, de elevarse a lo más profundo de su espíritu libre. Entre los instrumentos de viento de Oaxaca que se combinaban con los sonidos de los instrumentos balcánicos. Una tuba servia y una oaxaqueña. Las dos en perfecta comunión. Detrás de cada interpretación, siempre se dejaba el sello de la gente de tierra y nube con sus compases graves, marcados e impíos.

“Al ataque” fue una de las frases que desataron los movimientos de los asistentes que por dos horas y media fuimos libres. Todos moviéndonos eclécticamente. Conscientes de la inconciencia que nos provocaba la música que ahí emanaba.

Fue el desate de un pandemónium donde las voces que emanaban palabras serbocroatas, zapoteco y mixe no opusieron diferencia pues todos sólo hablaban el lenguaje universal: la música.

Llega el repiqueo de las campanas de la Iglesia de Santo Domingo, el misterio de las voces búlgaras se hace presente con el maravilloso dueto de mujeres ataviadas con la ropa típica de los Balcanes, recuerdo de las mujeres en su huipil y sus tehuanas. 15 voces masculinas de un coro clásico interpretan el Réquiem perfecto. Vamos poco a poco muriendo. Es obvio que después de esto ya nadie será el mismo y habrá de renacer.

Otro réquiem. Poco a poco la tuba balcánica era apagada por la tuba oaxaqueña. Las notas se intensificaban y cual comunión con la naturaleza la lluvia cada vez caía con más fuerza, como siguiendo las notas. No era esa una lluvia que ahuyenta, sino era una lluvia que limpia las almas. Toda ellas enjugadas fraseando Kalasnjikov. Ausencia fue lo que menos se pensó pero la que penetró en todos gracias a la hipnotizante voz de Alen Ademovic, quien hiciera segunda voz a Goran y estuviera a cargo de diferentes instrumentos.



La potencia de los sonidos que ya habían envuelto al público se multiplicó por mucho, logrando con ello una explosión de júbilo. De ese júbilo que sólo puede haber en una verdadera celebración de la vida. Así, con los contrastes, boda y funera, muerte y vida, erotismo y reserva. Todo esto condujo Goran en la noche del domingo. Por momentos en el cielo, por momentos en la Tierra y por momentos nos llevaba a un submundo donde sólo nosotros sabíamos qué había ahí.


El ciclo de la vida concluía. Renacimos. Celebramos a la vida y a la muerte. Celebramos que en la muerte haya vida y que todos, a pesar de ser tan diferentes, somos perfectamente iguales...

¡Viva la Música!

*Texto y fotos: (C) Sarai Robledo 2008

viernes, 18 de marzo de 2011

Hermanas



Mujer, como tú no hay dos,

eres mi hermana,
mi compañera.



Eres mi silencio en la locura,

mi grito en la lucha,
mi diario en el camino.

Eres quien me escucha,
con la que crezco día a día.

Porque las dos juntas sabemos sumar uno,
procesos que se complementan.

Tan iguales para sumar fuerzas,
tan distintas para sumar ideas.

Compañera en el camino,
si me rezago tú me jalas,
si me adelanto tú me sigues.

Te amo como se puede amar a la familia.


martes, 8 de marzo de 2011

El sonido de una flor

Semanas atrás, en una clase platicaba sobre las posibilidades poéticas de la palabra. En ella, retaba a mis alumnos a pensar en cuál sería el sonido de una flor al morir y, curiosamente, no es sino hasta el día de hoy que me encuentro frente a la magnitud de dicho planteamiento.

Una flor no muere sino hasta que la matas o la dejas morir y, quien lo hace, no puede sino escuchar el sordo reclamo por la estúpida acción cometida. Uno no debe matar una flor.

La flor, al morir, lo hace silenciosamente pues la ausencia del reclamo por el dolor es la angustia de quien percibe su muerte.


Foto: Arturo Ávila Cano*

Colonizados somos los que podemos escuchar el susurro de una flor, ésta nos cuenta las historias de la tierra, los secretos ínfimos que la abrazan. Cuando una flor muere, se pierde la sabiduría que sólo ella guardaba. Inescrutable la nota que deja cuando se marcha.

El sonido de una flor al morir, supongo, debe ser idéntico al sonido que deja la última lágrima que resbala sobre la mejilla que la contiene en el momento preciso en que alguien es olvidado.

* Tuve el atrevimiento de tomar esta imagen realizada por un excelente fotógrafo y querido amigo, Arturo Ávila Cano, misma que tiempo atrás me atrapara por su fuerza fotopoética. Espero hacerle un poco de justicia a tan hermosa composición. Pueden visitar el espacio de Arturo haciendo click aquí.

lunes, 7 de marzo de 2011

No viniste

Recuerdo que una vez alguien me dijo que el que nada espera tiene menos probabilidades de desilusionarse. Confieso que le creí un poco y pensé que no debía esperar nada de nadie. Luego, me di cuenta de que era absurdo y decidí esperarlo todo.

El terreno donde esperar se vuelve un deporte de alto riesgo es en el del amor: esperar puede significarlo todo. Es en la espera amorosa donde se juega uno la vida o la muerte (como bien lo apuntó ya un poeta: “Quien ama más de una vez, también morirá muchas veces”).

Yo arriesgué mi vida en una metáfora sin conocer que ésta sería como aquel tigre que caminaba despacio entre los cristales de la Bohemia en la Cosmología esencial de Rafael Pérez Estrada. Y así, en un perfecto cuadro cinematográfico, estaba yo esperando una tarde de jueves a que el tigre-metáfora regresara a mis ojos. Por supuesto, no lo hizo.

Ahora pienso que, para completar el cuadro, alguien tendría que haberme dicho: ¡No lo mires, es sólo una metáfora, y los ojos de las metáforas contagian falsas emociones poéticas!



viernes, 4 de marzo de 2011




La mujer insomnio cortó sus palabras. Él, sólo la miró como cuando alguien mira a una persona que está por desaparecer. La mujer insomnio develó las cartas que habían estado ocultas. Él, con paso trastabillante, se alejó entre la concurrencia. Ambos tenían compañía. Ella, un perro llamado dolor. Él, la nada sagrada.



jueves, 3 de marzo de 2011

Ne me quitte pas




—¡Ne me quitte pas, ne me quitte pas!— cantaba la mujer insomnio hasta sentir que perdía la voz en cada palabra, en cada nota. Él, perdiéndose en otra canción, no sabía que ella, la mujer insomnio, no sabía francés.